Decídete, anímate, toma las riendas de tu vida, empieza a vivir y a hacer lo que te inspira, lo que te alegra, lo que siempre soñaste, porque desgraciadamente cuando te das cuenta, ya se fueron los años y tal vez ya sea demasiado tarde.
¿ QUÉ ESPERAS PARA SER
DECISIONES
FELIZ?
El día de hoy quisiera platicar acerca de una situación que muchos de nosotros hemos experimentado y que puede llegar a causarnos secuelas de frustración. Se trata del malestar en el trabajo, ese sentimiento que provoca que cada vez, sea más difícil presentarnos a nuestro empleo y que se puede presentar por diversas causas como, sueldo no remunerativo, poca o mínima aspiración de crecimiento, mala relación con el jefe o con los compañeros etc.
Decídete, anímate, toma las riendas de tu vida, empieza a vivir y a hacer lo que te inspira, lo que te alegra, lo que siempre soñaste, porque desgraciadamente cuando te das cuenta, ya se fueron los años y tal vez ya sea demasiado tarde.
Muchas personas padecen este martirio día con día, sin embargo el mercado laboral es tan limitado, que no hay más opción que aguantar valientemente la situación, esperando que en el futuro suceda un“ milagro”, me cambien de área o me saque la lotería. Esa inseguridad que nos lleva a aguantar todo tipo de situaciones, injusticias, regaños, malos tratos e inclusive hasta humillaciones cometidas por tu jefe, el cual sin la más mínima muestra de respeto, piensa que eres su“ propiedad”.
Lo triste del caso, es que los milagros no se dan tan seguido, por lo cual es necesario que cada persona empiece a tomar el control sobre sus acciones y tome en cuenta que su situación empezará a mejorar, el día que la enfrentes y busques un cambio. Entiendo que el ingreso es importante pues hay compromisos que cumplir, sin embargo, tal vez sea el momento preciso para que busques otros aires, pongas ese negocio que siempre has querido o te dediques a aquello que más te encanta. ¿ No te gustaría ser dueño de tu tiempo?, ¿ Hacer aquello que te apasiona y que además te paguen por ello? Estoy seguro que sí. Simplemente que no te atreves a dar el paso, pues ese salario quincenal que recibes aunque sea pequeño y raquítico, está“ seguro”.
Créeme, sé de lo que estoy hablando, yo mismo he pasado por este proceso y sé lo difícil y frustrante que puede llegar a ser, y creo que no hay peor castigo en la vida que estar diariamente un promedio de 8 horas, en un lugar donde no quisieras pasar ni cinco minutos.
Decídete, anímate, toma las riendas de tu vida, empieza a vivir y a hacer lo que te inspira, lo que te alegra, lo que siempre soñaste, porque desgraciadamente cuando te das cuenta, ya se fueron los años y tal vez ya sea demasiado tarde. Ojalá que este escrito te inspire de alguna forma a tomar una decisión con la cual encuentres la felicidad y la plenitud. Me daría mucho gusto saber que“ tu barco ya tomó otro rumbo”
Autor: Gerardo Múzquiz | Comercialización & Customer Service
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