Brescia, 29 de noviembre 1888
Querido Vincent,
muy a mi pesar, tuve que cancelar
mi estancia en Arles. Quería darte las gracias por tu
generosa hospitalidad y por tu afecto. Pienso volver
pronto por más tiempo. El pequeño cuadro que me regalaste, lo tengo ahora delante, veo la cama en la que
dormí casi diez noches, la pequeña habitación donde
cenamos y tuvimos las siempre excitantes discusiones
con Gauguin. Por cierto ¿Cómo va vuestra relación? No
creo que puedas soportar su presencia mucho tiempo,
pues tenéis caracteres muy diferentes. Sin embargo he
encontrado muchas cosas en común entre nosotros.
Por un lado los dos somos felices por no haber aprendido nunca a pintar y por otro nunca nos han comprado
un solo cuadro. Decidí ser el primero que te compraría
un cuadro y además quiero que me hagas un retrato.
Sé que solamente necesitas que pose una sesión, algo
que nuestro amigo Cézanne no sería capaz de hacer, le
pedí un retrato y aún estaría posando días y meses.
Gauguin se ha comprometido a hacerme un retrato a
cambio de una de mis obras. No te dije nada pero tengo
una pintura de Gauguin que te representa mientras pintabas. Te escribiré pronto, Mientras tanto muchas gracias y un cariñoso saludo.
37