25 años CLN Mayo 2017 | Page 10

Desde Auckland, Nueva Zelanda Voy a cumplir tres años desde que lo dejé, pero todavía Los Nogales sigue siendo mi colegio y mis niños son los de allá. M e emociona mucho ser considerada parte de la historia de Los Nogales y poder unirme a la celebración de los 25 años con estas líneas. Voy a cumplir tres años desde que lo dejé, pero todavía Los Nogales si- gue siendo mi colegio y mis niños son los de allá. Los Nogales siempre será la casa a la que vuelva apenas aterrice en Bogotá, la institución que ha marcado quien soy como profesional y que me inspira en términos pedagógicos y humanos. De los 25 años, tuve la fortuna de pasar casi 15 en distintos roles. Mi infancia como profeso- ra la viví del año 87 al 90 cuando el Colegio es- taba todavía en Provenza. En esas felices épocas de ser profesora de inglés de 4° de la promoción 95, los profesores trabajábamos en un establo, hacíamos dittos de colores, aprendíamos a ense- ñar matemáticas con Magú, nos burlábamos de nosotros mismos en representaciones dirigidas por Pepita, llevábamos lonchera en canastos de colores y, sobre todo, íbamos a taller con la temi- da Claudia Ordóñez. Mientras tanto los niños llevaban uniformes coloridos, jugaban pirañas en los recreos, bailaban en Colombia en los Noga- les, hacían teatro en frente de la capilla, y oían a las Flans. Después de cuatro años por fuera, volví a la Coordinación de Inglés en el año 94 cuando el Colegio ya estaba en la nueva sede. El crecimien- to de los siguientes 10 años de adolescencia fue enorme para todos. Al ritmo de los edificios, yo pasé de puesto en puesto hasta la Vice-rectoría. Todos seguimos en talleres, reflexionamos sobre aprender a aprender, importamos profesores ex- tranjeros, combatimos a favor de las poco popu- lares medidas de “no al alcohol”, creamos un código de honor, lideramos la Asociación Alian- za Educativa. Las promociones, una tras otra, nos han llenado de orgullo. Tuve el privilegio de compartir con muchas generaciones y conocer de cerca a otros tantos en las aventuras de las caminatas, los sábados en el servicio social, las fiestas, las presentaciones artísticas y musicales, la banda, los consejos estudiantiles, los innume- rables triunfos deportivos, las clases y uno que otro regaño. Han sido 25 años de aprendizaje y crecimien- to. Espero que sigan muchos más de seguir con- solidando la lúcida visión de los fundadores de los Nogales y la admirable dirección de Luisa desde la rectoría. Han creado, más que unos edi- ficios imponentes, un colegio único para genera- ciones de colombianos que hoy en día gozan del privilegio de lo mejor en educación escolar con la condición y el compromiso de que usen esa formación de manera responsable y honesta. Para mí fue un verdadero privilegio haber creci- do con el Colegio Los Nogales. Constanza Tolosa // Profesora y Coordinadora de Inglés 1987-1990 1994-2004 Colegio Los Nogales | 9