La aparición de este virus afectó a varios países, principalmente en lo que respecta a salud pública, pero también un área muy sensible como lo es la economía. En este artículo comentaremos las estrategias utilizadas o los montos a desembolsar por algunos países de Sudamérica para enfrentar la pandemia y sus consecuencias. En nuestro país, la idea del Gobierno pasa por aumentar la inversión en obras públicas, reforzar a las micro, pequeñas y medianas empresas, que constituyen
constituyen cerca del 97 % del tejido empresarial del país, y fortalecer la banca pública para que pueda asistir a las pequeñas empresas. También se pidieron préstamos para insumos y construcción de hospitales de contingencia. Asimismo, se exoneraron
algunos servicios públicos como Ande (Administración Nacional de Electricidad) y Essap (Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay S.A.). En Ecuador, en lo que respecta a lo económico, se ayuda con unos 60 dólares por dos meses para 400.000 familias de comerciantes ambulantes y agricultores, y préstamos de hasta 2.500 dólares con plazo de gracia y bajo interés. En Venezuela, donde ya se estaba sufriendo en lo que respecta a la economía antes de la pandemia, se realizaron pagos por seis meses de sueldos a empleados de pequeñas y medianas empresas, y suspensión de pagos por alquileres de comercios y viviendas principales. Tambien,
exoneración de pagos por créditos. Nuestro vecino país, Argentina, aumentó los subsidios a familias pobres, jubilados y desocupados. También ayuda financiera por unos 5.300 millones de dólares a pequeñas y medianas empresas, según indican medios argentinos. En el Brasil, recibieron un plan de ayuda económica por unos USD 30.000 millones para utilizarlo en los próximos tres meses (junio, julio y agosto de 2020), principalmente para los sectores mas pobres. Colombia se declaro en Estado
de Emergencia Nacional el pasado 17 de marzo para poder abordar la crisis de salud; en ese sentido, como parte de respuesta para enfrentar dicha emergencia del COVID-19, el 31 de marzo el Gobierno de Colombia recibió un desembolso de US$ 250
millones de un préstamo para políticas de desarrollo, mejor conocido como CAT DDO, del Banco Mundial.
LA ECONOMÍA EN PANDEMIA