COMO
NIÑOS
POR LUIS BOGGIERO M.
Me asomo a la ventana de la vida
y veo al niño que, dormido,
habita en nuestros corazones,
en el de todos.
Cada ser humano
lleva un niño dormido
en su interior.
Haceros como niños,
hacerse como niños es urgente
para cerrar infiernos y abrir cielos,
para arrancar los hierros de la vida
y sembrar flores en sus huecos.
Hacerme, hacerte como niño
es tan urgente
que la oportunidad de levantarnos
se nos escapa a grandes pasos
por el loco camino de la prisa.
Estamos ocupados recitando
palabras y actitudes importantes,
quemando vida, creyéndonos solemnes
fabricando rigor, cadenas, ilusiones,
tanques apolillados incapaces
de contener el agua tan preciosa.
Hagamos como niños;
tomemos el caballo de madera,
la inocencia, el candor, la confianza.
Dejemospara siempre la pistola,
el puñal, la justicia y el honor,
la patria omnipotente.
Abramos el camino a la intuición,
pensemos que es posible lo imposible,
que, de verdad, hay ángeles que guardan
nuestros pasos y
que hadas y gnomos nos rodean.
Vamos a desmontar este teatro
de velos y de abismos,
vamos a colocar en su lugar, el corazón,
y a encenderle tres velas de colores.
Saltando al sol si hay sol,
bañándo nos en lluvia, si es que hay lluvia
sin ayer, sin mañana,
viviendo con la gloria del presente
la gloriosa presencia de la vida,
como niños,
como tan sólo un niño sabe hacerlo.
SAMSARA | 60 Julio/Agosto 2020