Un ejemplo muy conocido es el Templo de
Quetzalcóatl o también conocido como
Pirámide de la Serpiente Emplumada cuya
compleja decoración hace que sea uno de los
edificios más bellos dirigidos al dios
Quetzalcóatl. En sus cuatro costados se
encontraban representaciones de serpientes
emplumadas en los taludes y tableros de cada
uno de los siete cuerpos que originalmente tuvo
el edificio.
Lo más impactante de la arquitectura
maya es que sin herramientas de metal, bestias
de carga o la rueda, los mayas construyeron
grandes ciudades en selva y montañas con una
gran perfección y variedad. Tanto sus templos
piramidales, palacios y observatorios estaban
llenos de detalles y grandes construcciones. Los
mayas eran determinados y su esfuerzo es
característico en cada uno de sus monumentos y
por más difícil que parezca una situación
siempre hay una solución.
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