El Aeropuerto Internacional de Rosario “Islas Malvinas” transita por una etapa de contrastes. Mientras celebra la recuperación de conectividad aérea con la incorporación de nuevas rutas, también se prepara para afrontar las dificultades que traerá aparejado el cierre temporal por obras de mantenimiento en la pista.
En el primer plano, la terminal aérea rosarina recibió recientemente una noticia alentadora: Latam Airlines anunció el regreso de su vuelo directo entre Rosario y San Pablo (Brasil) a partir del 30 de diciembre. Esta reactivación es clave porque permitirá a los pasajeros rosarinos acceder de manera más ágil a un amplio abanico de destinos internacionales, especialmente en Europa, a través del importante centro de conexión que la aerolínea posee en la ciudad brasileña.
Esta novedad representa un importante paso adelante en la recuperación de la conectividad aérea de Rosario, que había sufrido un revés cuando Latam dejó de operar esta ruta, en julio de 2019. Además, se suma a la reanudación de la conexión Rosario-Lima, discontinuada durante la pandemia, fortaleciendo así la conectividad con destinos del Caribe y Norteamérica. La ruta Rosario-San Pablo abrirá la posibilidad de ir a Europa sin pasar por Ezeiza, conectando con Portugal, Italia, Francia, Alemania y Reino Unido, entre otros destinos.
Sin embargo, este impulso en la conectividad aérea se verá interrumpido por las obras de mantenimiento y reparación de la pista principal del aeropuerto. El gobierno provincial tiene previsto salir a licitar esta obra, que viene demorada desde el año pasado, en septiembre.
La pista del Aeropuerto de Rosario está operable, pero requiere de una repavimentación debido al deterioro que genera el uso y la “falta de mantenimiento durante los últimos años”. Si bien la decisión de llevar adelante la obra es fundamental para garantizar la seguridad y operatividad del aeropuerto, la misma implicará un parate en la actividad aerocomercial durante el tiempo que duren los trabajos. Esto generará inconvenientes para los pasajeros, las aerolíneas y el sector turístico de la región.
En ese marco, empezó a sobrevolar la alternativa de concesionar la terminal aérea. El motivo número uno en la lista de argumentos de quienes abogan por la concesión es que sólo un privado podría detentar el poder de negociación suficiente para lograr acuerdos convenientes con aerolíneas y empresas de servicios sin volver con migajas.
Una de cal y una de
arena para el Aeropuerto
(Sigue...)
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