La metalúrgica Inmmecsa inauguró en noviembre del año pasado una planta fabril de última generación en Salta. Sus integrantes provienen de diferentes zonas productivas del país, pero tienen mucho en común: sus apellidos llevan varias generaciones en la agroindustria argentina. Diego Savini es uno de los titulares de Industrias Savini, una empresa con base en Villa Gobernador Gálvez y más de medio siglo de trayectoria en la fabricación, reparación y mantenimiento de equipos para la industria aceitera (especialmente plantas de extrusión-prensado de soja y otras oleaginosas). Ramiro Muñoz, en tanto, es uno de los dueños de Salvita (Hijos de Salvador Muñoz SA), una de las alimenticias más grandes del NOA, con especialización en la producción de hortalizas.
Se asociaron en la creación de Inmmecsa en 2022 para entrar de lleno en el sector minero. Y hacia fines del año pasado cortaron cintas de una planta de 2.500 m2 en el departamento de General Güemes, Salta (en la estratégica rotonda de Torzalito, en la intersección de las rutas 9 y 34), tras una inversión de u$s2 M.
“Ramiro me planteó que en el norte no existían metalúrgicas de la envergadura de las que hay en la región Centro y el desarrollo minero lo hacía cada vez más necesario. Empezamos a equiparnos con tecnología de última generación. Compramos granalladoras, una máquina de perforado de perfiles importada, puente grúa, pórtico de soldadura de última generación, corte por plasma, plegadoras, centros de mecanizados, robots de soldadura y cabina de pintura. Realmente estamos equipados al mejor nivel, no tenemos competencia en la región”, opinó Savini.
La idea es atender, desde Salta, al triángulo del litio, del que también forman parte Jujuy y Catamarca. “También hay que tener en cuenta que hay muchísimas empresas evaluando la extracción de cobre, que hoy no está tan desarrollada pero tiene un potencial enorme; además del resto de la demanda industrial de la zona”.
A mediano plazo, la idea es duplicar producción: hoy están en 300 toneladas mensuales y la idea es llevarla, en una primera tanda estable, a 600 toneladas mensuales. Por eso, se pusieron a fichar lotes terrenos para instalar un complejo productivo mayor, ya en terreno propio. “A futuro también está la idea de ofrecer montaje y obra civil, entregar un trabajo llave en mano, pero primero hay que afianzarse en lo que ya hacemos, que es la parte de estructura metalmecánica”, concluyó Savini.
Fueron a la montaña
para arrimarse al
triángulo del litio
Empresarios del interior unieron fuerzas para atender a los nuevos mercados emergentes. Manufacturan 600 toneladas y van por más.
PIONEROS / INMMECSA
A mediano plazo, la idea es duplicar la producción.