En 1863, el ferrocarril llegó a Rosario para conectarla con Empalme Villa Constitución de la mano de la empresa británica Central Argentine Railway, lo que fue el puntapié inicial de una larga red ferroviaria que luego se extendió por todo el país. Siete años después se produjo un hito histórico: la inauguración del Ferrocarril Central Argentino, que unió la ciudad con Córdoba, generando un movimiento económico, comercial, agrícola, social y cultural inédito para la época.
Aquella vía férrea fue impulsada por figuras como Urquiza, Alberdi y el empresario estadounidense Wheelwright. Fueron 400 km que se enlazaron gracias al tren y que fueron poblados por inmigrantes.
El ferrocarril trajo consigo numerosos beneficios para la ciudad de Rosario. Permitió una mayor conexión y comunicación con otras ciudades y regiones del país, lo que facilitó el intercambio comercial (por ejemplo de productos agrícolas) y el desarrollo de la economía local. También atrajo oleadas de inmigrantes europeos, ya que el acuerdo les otorgó tierras a ambos lados de las vías a los inversores, lo cual dio lugar a nuevas colonias y asentamientos.
La llegada del tren permitió a las personas viajar más fácilmente, lo que fomentó la migración, el intercambio cultural, el acceso a la educación y la salud. El ferrocarril tuvo además su aporte cultural, porque los británicos que lo construyeron y lo administraron trajeron a Rosario los deportes modernos. Fueron los fundadores del Rosario Cricket Club (hoy Atlético del Rosario) y de Newell’s y Central.
Ya en el siglo XX y con las guerras mundiales, desapareció el interés europeo en efectuar nuevas inversiones. Entre 1946 y 1948 se nacionalizaron los servicios pero no hubo nuevas inversiones, y a partir de los '60 se priorizó el transporte automotor. El declive se coronó en los '90 con la privatización y cierre de servicios.
En 2008 se lanzó un proyecto de “tren bala” para unir Rosario con Buenos Aires, pero nunca se concretó. Solo sobreviven en el sistema local un puñado de viajes de pasajeros que viajan a baja velocidad, y servicios de cargas que operan muy por debajo de las necesidades de una red vial saturada por la circulación de camiones.
La vía que impulsó el despegue pero
luego se apagó
La llegada del primer tren, el Central Argentino, fue una revolución que apalancó el boom económico y también marcó la cultura local.
ENTREVISTA CON GASTÓN MINARDI
EL FERROCARRIL (1863)
La estación Rosario Central,
fotografiada en 1885.
EMPRESAS CON HISTORIA