Digital publication | Page 7

Papá Noel

 

Había una vez dos hermanos: Miguel y Clara. Vivían en una casa enorme y no había nada en el mundo que no pudieran tener. Así y todo, año tras año esperaban ansiosos la llegada de la navidad. Adoraban recibir regalos. Todos los veinticuatro de diciembre. Tenían por costumbre esconderse en el cuartito más alto de la casa y esperaban allí a que la sala se llenara de regalos. Cuando este momento llegaba algún sirviente los llamaba tocando unas campanitas y los chicos aparecían corriendo. Una vez, después de esperar en el altillo como siempre entraron corriendo a la sala y se encontraron con algo que jamás habían visto y apareció Papá Noel poniendo los regalos y en ese momento Papá  Noel salió corriendo de la sala y los chicos empezaron a perseguirlo por toda la casa y llego un momento inesperado, Papá Noel ya no estaba al día siguiente los regalos ya no estaban y se sorprendieron muchísimo porque ayer a la noche los regalos estaban pero al día siguiente no.  Entonces se fueron a desayunar con una mirada triste, y a la vez enojada. Cuando terminaron de desayunar se fueron al jardín de la casa y había una nota que decía no sé por qué me persiguieron anoche, aun así les traeré sus regalos pero con una condición… ustedes van a ayudar a las personas como aldeanos, campesinos y pobres les compartirán algunas riquezas pero solo así les traeré sus regalos. Entonces fueron a su casa corriendo: buscaron oro o cuadros y otras cosas valiosas a la primera persona que fueron a compartirle riquezas fue a un campesino le dijeron-hola señor le doy este lingote de oro. El campesino salto de alegría y les dijo – ¡muchicimas gracias! Son muy buenas personas, se fueron a darle riquezas a un aldeano y le dijeron con el mismo respeto que al campesino – hola venimos a darle este cuadro de la mona lisa en este pueblo valía una fortuna. El aldeano con gran felicidad le dijo – gracias. Después fueron a darle cosas al pobre del mercado ya que nadie le compraba les dio un poco de lastima y le dijeron – hola señor González  venimos a darle algo para que tenga por lo menos algo y le dieron 10 lingotes  de  oro como así de hierro entonces al pobre le brillaron los ojitos de la emoción y los abrazó y les dijo – muchísimas gracias. Y volvieron a casa y estaba Papá Noel sentado con todos los regalos y les dijo – hola muy bien hicieron feliz a todo el pueblo tomen sus regalos y adiós que la pasen bien con sus regalos y nunca se olviden que además de que ustedes sean felices también los demás. – gracias Papá Noel estamos agradecidos por los regalos y porque los demás sean felices.   Fin.  

                                          

Luca y Martín