Revista GuitarraMX JUL/AGO 2018 | Page 64

No es la flecha, es el indio, el que es perico donde sea es verde, etc.… Todos hemos oído estas frases y otras parecidas, también hemos visto el video de Satriani donde toca con una guitarra de gama baja y suena… pues a él! Así que, ¿Qué tanto influye el equipo en la ejecución? ¿Es verdad que sin importar el precio de nuestro instrumento vamos a sonar a nosotros? ¿Entonces porqué gastar tanto si al final no hay diferencia? No se preocupen, aquí les daré una guía rápida de lo que constituye el tono.

- El tono es subjetivo

Así es, lamento decirles que no hay una respuesta concreta para un tono “bueno” o “malo”. Pongamos como ejemplo dos guitarristas muy distintos, ambos reconocidos shredders texanos pero en lados opuestos del espectro: Dimebag Darrell y Eric Johnson. Los dos tienen un sonido muy particular y reconocible. Sin embargo, es difícil pensar en una pieza como “Cowboys From Hell” interpretada con el mismo tono que “Manhattan” y viceversa. Ambas cosas funcionan bien dentro de su propio entorno, por lo cual, no podemos decir que un es mejor que otro.

- Menos es más

Hay una broma que dice “si menos es más, imagina cuanto más es más”. Aunque tiene lógica, aquí me refiero a que a veces nos engolosinamos con los efectos y no nos damos cuenta que no siempre debe estar prendido todo para lograr un buen tono. Es preferible empezar con algo básico, como un sonido limpio con un poco de reverb y sobre eso ir metiendo uno a uno modulaciones, Delay. En caso de un sonido saturado, probar con el EQ del ampli primero antes de meter un ecualizador grafico o un compresor. Conéctate directo y empieza desde ahí.

- ¿Guitarra cara o barata?

Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. ¿Qué tanto afecta la gama en nuestro sonido y ejecución? Pues les diré que mucho. Si bien, como dije antes, el tono es subjetivo, hay cosas que no, tales como la estabilidad de la afinación, la construcción y consistencia. Piensa en las guitarras que usan los músicos profesionales, es raro que veas a alguno de ellos afinando a media canción, batallando con los selectores o moviendo el potenciómetro para que no se les vaya la señal, una guitarra de gama alta debe traer componentes en los que puedes confiar no fallarán en mucho tiempo. Un punto personal es la comodidad, nadie quiere estar batallando, y una guitarra de buena calidad te dará muchas facilidades para un ajuste óptimo a tus necesidades.

- ¿Amplificador real o virtual?

En la época actual, ya no necesitamos traer un amplificador de bulbos para lograr esa respuesta y calidez. ¡Ni siquiera tenemos que tener un amplificador! La tecnología nos facilita la vida cada vez más. Aquí la gama influye mucho en cuanto al sonido. Entre mejor sea, mejor reproducirá la respuesta de un amplificador real. Puntos extra si tiene una buena emulación de gabinete para ir directo a la mezcladora.

- Todo tiene un límite

Aunque seas el mejor, tu equipo solo llega hasta un punto, es decir, si te gusta el metal extremo, una pastilla con single coils y un amplificador tipo Fender no te dará la saturación ni profundidad que buscas. Un buen modo de empezar es checar que usa tu guitarrista favorito y dentro de tus posibilidades conseguir lo más parecido, lo cual me lleva al siguiente punto.

- Ten una referencia clara

Si sabes exactamente lo que quieres, será más fácil y rápido encontrarlo, hazte la pregunta de cómo te gustaría sonar, por ejemplo, para mí una guitarra de rock saturada debe oírse como la de Eddie Van Halen, en especial los discos” F.U.C.K.” Y “balance”, así como una guitarra limpia con chorus y delay como Juan Valdivia de Héroes del silencio, esas son mis referencias principales. Desmenuza que es lo que te gusta de ese sonido en específico y busca en internet los seteos y efectos que usa, así tendrás un punto de partida muy definido.

- ¿Entonces… el tono no está en los dedos?

Desmintiendo el mito… no, el tono no está en los dedos, está en tu cabeza, porque ahí es donde tienes la referencia de cómo debe sonar, y por supuesto, es muy personal, piensa en las veces que tocaste con el equipo de otra persona e inmediatamente empezaste a buscar tu sonido o cuando te llego ese pedal o multi efectos y enseguida checaste si te podía dar lo que querías, y también, cuando no cumplió con eso, te deshiciste de él. Una pieza de equipo debe inspirarnos a tocar a diario, servir como herramienta creativa, hacerse una extensión de nosotros y obligarnos a mejorar muestra técnica. Una vez que no tenemos que preocuparnos por el tono, nos concentramos en lo que realmente importa: hacer música. Un equipo profesional no nos hará mejores músicos ni corregirá nuestras deficiencias de la noche a la mañana, todo lo contrario, las hará mas evidentes, así que... vale el gasto? La respuesta más política es que si lo que tienes actualmente no te limita y te da lo que quieres, es lo adecuado.

Espero esto te haya servido y por favor comparte tus puntos de vista en [email protected]

¡Y ahora sí, manos a la música!

64 | GuitarraMX | JUL/AGO 2018

COLUMNA

Por: Héctor Rivera

El tono está

en los dedos

“ El tono esta en los dedos

No es la flecha, es el indio, el que es perico donde sea es verde, etc.… Todos hemos oído estas frases y otras parecidas, también hemos visto el video de Satriani donde toca con una guitarra de gama baja y suena… pues a él! Así que, ¿Qué tanto influye el equipo en la ejecución? ¿Es verdad que sin importar el precio de nuestro instrumento vamos a sonar a nosotros? Entonces por qué gastar tanto si al final no hay diferencia? No se preocupen, aquí les daré una guía rápida de lo que constituye el tono.

-El tono es subjetivo

Así es, lamento decirles que no hay una respuesta concreta para un tono “bueno” o “malo”. Pongamos como ejemplo dos guitarristas muy distintos, ambos reconocidos shredders texanos pero en lados opuestos del espectro: Dimebag Darrel y Eric Johnson. Los dos tienen un sonido muy particular y reconocible, sin embargo, es difícil pensar en una pieza como “Cowboys From Hell” interpretada con el mismo tono que “Manhattan” y viceversa, ambas cosas funcionan bien dentro de su propio entorno, por lo cual, no podemos decir que un es mejor que otro.

-Menos es mas

Hay una broma que dice “si menos es más, imagina cuanto más es más”. Aunque tiene lógica, aquí me refiero a que a veces nos engolosinamos con los efectos y no nos damos cuenta que no siempre debe estar prendido todo para lograr un buen tono. Es preferible empezar con algo básico, como un sonido limpio con un poco de reverb y sobre eso ir metiendo uno a uno modulaciones, Delay. En caso de un sonido saturado, probar con el EQ del ampli primero antes de meter un ecualizador grafico o un compresor. Conéctate directo y empieza desde ahí.

-¿Guitarra cara o barata?

Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. ¿Qué tanto afecta la gama en nuestro sonido y ejecución? Pues les diré que mucho. Si bien, como dije antes, el tono es subjetivo, hay cosas que no, tales como la estabilidad de la afinación, la construcción y consistencia. Piensa en las guitarras que usan los músicos profesionales, es raro que veas a alguno de ellos afinando a media canción, batallando con los selectores o moviendo el potenciómetro para que no se les vaya la señal, una guitarra de gama alta debe traer componentes en los que puedes confiar no fallarán en mucho tiempo. Un punto personal es la comodidad, nadie quiere estar batallando, y una guitarra de buena calidad te dará muchas facilidades para un ajuste óptimo a tus necesidades.

-¿Amplificador real o virtual?

En la época actual, ya no necesitamos traer un amplificador de bulbos para lograr esa respuesta y calidez, vaya, ni siquiera tenemos que tener un amplificador! La tecnología nos facilita la vida cada vez más, aquí la gama influye mucho en cuanto al sonido, entre mejor sea, mejor reproducirá la respuesta de un amplificador real. Puntos extra si tiene una buena emulación de gabinete para conectarte directo a la mezcladora.

-Todo tiene un limite

Aunque seas el mejor, tu equipo solo llega hasta un punto, es decir, si te gusta el metal extremo, una pastilla con single coils y un amplificador tipo fender no te dará la saturación ni profundidad que buscas. Un buen modo de empezar es checar que usa tu guitarrista favorito y dentro de tus posibilidades conseguir lo más parecido, lo cual me lleva al siguiente punto.

-Ten una referencia clara.

Si sabes exactamente lo que quieres, será más fácil y rápido encontrarlo, hazte la pregunta de cómo te gustaría sonar, por ejemplo, para mí una guitarra de rock saturada debe oírse como la de Eddie Van Halen, en especial los discos” F.U.C.K.” Y “balance”, así como una guitarra limpia con chorus y delay como Juan Valdivia de Héroes del silencio, esas son mis referencias principales. Desmenuza que es lo que te gusta de ese sonido en específico y busca en internet los seteos y efectos que usa, así tendrás un punto de partida muy definido.

-¿Entonces… el tono no está en los dedos?

Desmintiendo el mito… no, el tono no está en los dedos, está en tu cabeza, porque ahí es donde tienes la referencia de cómo debe sonar, y por supuesto, es muy personal, piensa en las veces que tocaste con el equipo de otra persona e inmediatamente empezaste a buscar tu sonido o cuando te llego ese pedal o multi efectos y enseguida checaste si te podía dar lo que querías, y también, cuando no cumplió con eso, te deshiciste de él. Una pieza de equipo debe inspirarnos a tocar a diario, servir como herramienta creativa, hacerse una extensión de nosotros y obligarnos a mejorar muestra técnica. Una vez que no tenemos que preocuparnos por el tono, nos concentramos en lo que realmente importa: hacer música. Un equipo profesional no nos hará mejores músicos ni corregirá nuestras deficiencias de la noche a la mañana, todo lo contrario, las hará mas evidentes, así que... vale el gasto? La respuesta más política es que si lo que tienes actualmente no te limita y te da lo que quieres, es lo adecuado.

Espero esto te haya servido y por favor comparte tus puntos de vista en [email protected]

¡Hasta la próxima y nos oímos pronto!