Revista GuitarraMX JUL/AGO 2017 | Page 33

Pimpeo

Entendamos el pimpeo no como el hecho de ponerle

luces neón a un carro, sino como la inversión de

algo que ayude al rendimiento del mismo.

Eso pasa con las guitarras.

Desde el sencillo, pero importantísimo, cambio de

cejilla (nut), hasta el cambio de electrónica con

posibilidades infinitas de texturas auditivas.

En la redacción de GMX, sometimos a distintos

ámbitos una Squier Stratocaster Classic Vibe

para ver su desempeño. Esta guitarra pertenece

a la gama más alta de la marca China y

sorprendentemente se defendió bastante bien.

En limpio se mueve super rico, porque, en las pastillas

del brazo y del medio, tiene esa dulzura que nos gusta;

pero cuando es necesario hacer un énfasis, la pastilla

del puente saca la casta y lo hace bien. Los problemas

comienzan cuando aumentas la ganancia, ya que,

si buscas algo atascado con algo de fuzz, las pastillas

pierden cuerpo y la distorsión se come todo,

dejándote un poco arrumbado.

La solución que se propuso era cambiar las

pastillas y coincidió en que nuestros amigos de

Seymour Duncan nos mandaran un golpeador

que ya viene cableado con las pastillas

Hendrix de la misma fábrica de Santa Mónica.

Este producto está diseñado perfectamente

para que el cambio lo puedas hacer tú mismo,

ya que sólo tienes que soldar la tierra física

de la guitarra a las pastillas y el jack. ¡Así de fácil!

Diferencias

Dos golpeadores con tres pastillas simples,

un selector de cinco pasos, un potenciómetro de volumen, dos de tono y un jack. Por fuera podrían parecer lo mismo, pero son completamente distintos.

La electrónica de la Classic Vibe, a pesar de ser la de gama más alta, tiene componentes de baja calidad: desde el cableado, hasta los potenciómetros. Esto es para reducir costos y también porque la línea de producción debe ser ágil y es más fácil maniobrar con este tipo de componentes.

La electrónica del golpeador Seymour Duncan es un deleite tan sólo al verla. El cableado es fino y resistente, lo cual permite una mayor conductividad y un mejor funcionamiento a ciertos ambientes, como los cambios de temperatura o presión. Los potenciómetros tienen un amplio espectro de volumen y tono, lo cual ya es punto completamente a favor. Es el tipo de componente que esperaríamos de parte de la gran empresa de pastillas. Y no olvidemos el mismísimo pickguard que podría no influir en el funcionamiento de la guitarra, pero se ve increíble que deje de ser de una sola pieza y pase a ser de tres. Quien no ha comprado un golpeador sólo por la estética, que aviente la primera piedra.

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